El templo se empezó a construir a finales del siglo XV, posiblemente sobre una iglesia anterior, y se finalizó hacia la mitad del siglo XVI. En estos años centrales del siglo XVI se construyó también la torre en estilo renacentista. El edificio ha sido declarado Monumento Histórico-Artístico.
Construida principalmente con mampostería de cantos, cal y arena, es de planta rectangular con ábside cuadrado. Su techumbre de madera se soporta sobre seis columnas de fuste elíptico, similares a las empleadas en muchas otras iglesias de la comarca.
En el interior destaca un altar barroco del siglo XVIII con imágenes de los siglos XVI y XVII. Muy interesantes son los dos ángeles que flanquean el inicio del ábside, ambos del XVIII. En el coro hay un exclusivo órgano barroco, uno de los más antiguos de Extremadura, construido en 1766 por Pedro de Aneza. Bajo el coro se encuentra un crucificado del siglo XVI, así como otras imágenes procesionales. A los pies de la iglesia se sitúa el baptisterio con una pila bautismal del siglo XVI.